Recuerdo aquella profecía gestada cuando la política exterior USA decidió que la mesa de ping-pong era mejor plataforma que las cubiertas de la VII Flota, para tratar con China: " sí somos capaces de venderle una aspirina al año a cada chino, serán mil millones de aspirinas al año". La profecía nunca se cumplió, no porque los chinos carezcan de la cafalea como patología habitual, sino porque fueron los chinos los que se pusieron a fabricar aspirina y son ellos los que ahora nos las venden a los mas de 6.000 millones de gente que habitamos el planeta azul, un tanto alterado en su color por la polución de tanta fábrica china, tan poco escrupulosa con el medio ambiente como con los derechos de sus trabajadores.
Al hilo de la profecía vuelta del revés, cada chino ha invertido en España tras la visita del cuarto rey mago, Li Keqiang, 0,15 euros, descontando los acuerdos ya firmados hace meses con REPSOL y SINOPEC, que no hace sino reforzar el papel de China en el mercado del crudo, estratégico para ellos.Portada de periódicos, páginas interiores de política y economía satisfacción a raudales, risas, apretones de manos, regalos folklóricos, y sobre todo silencio, mucho silencio sobre los "temas incómodos", llaménse derechos humanos, sindicales, "nacionales" ( Tíbet o Sinkiang). Si como ZP ha repetido hasta la saciedad,la economía es un "estado de ánimo", no conviene morder la mano que te da una migaja y sobre todo te hace una oferta de amor eterno. Un presidente tan relativista como el que tenemos, veleta o tornadizo en roman paladino, estará dispuesto a volverse partidario del matrimonio a la antigua, para toda la vida con tal de que Li siga dejándose masajear al espalda,haciendo de cada migaja que regala, un festín a los ojos de los que siguen siendo capaces de ver brotes verdes en el verdín del óxido.
2 comentarios:
La verdad es que no creo que sea una posición exclusiva de nuestro presidente. Creo que cualquier otro, de cualquier otro partido, sería también incapaz de recordar al Vice-Primer Ministro Chino algunas cuestiones tan básicas como las que tú indicas.
Gracias por tu artículo, Miguel Angel.
Estimado Javier. Solamente la Rusia revolucionaria fue capaz de hacer "diplomacia abierta", diciéndolo todo, incluso los planes de los aliados para el mundo tras la derrota de Alemania y Austria- Hungría. Aquella idea de Lev Trosky ( que rida lo de güilic ), duró....un ratito en la Historia. Ni siquiera la Rusia revolucionaria fue capaz de dejar de lado la razón de estado. No pretendo que seamos más valientes que nadie, pero al menos no hacer el ridículo. Un día despues de que Li abandone el país, nuestro diferencial con Alemania vuelve a colocarse en los 270 puntos básicos. Y el lunes...a pechar con Portugal. Ya que nuestro gobierno no puede ser valiente, al menos que no haga el ridículo, qu ehaga de la discrección un valor, de la frialdad una virtud. Y habrá que recordarle este silencio cada vez que saque pecho con las bobadas de la Alianza de la Civilizaciones y sus ad lateres pajinianos. Leer hoy las declaraciones del embajador chino en "El Mundo" es el resutlado de una pelitesía que roza la sumisión. Un saludo.
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