Aprovecho las vacaciones para ver los capítulos de la serie "El Imperio del Paseo de Tablones" ( Boardwalk Empire), serie inequívocamente americana, producida por Scorsesse. La historia es la Mafia, o las mafias que afloraron e incrementaron su poder a la sombra de la prohibición. Pero como se podía esperar, es el trasfondo político,la corrupción basada en el caciquismo lo que determina que pueda crecer la hidra del delito, de la forma en que lo hizo en la feliz ( sic ) sociedad americana de los años 20 del pasado siglo. No era una cuestión de italianos, de sicilianos o de calabreses. Era sobre todo un poder político decidido a corromperse y a corromper, a hacer de la ganancia el leit motiv de su actuación. La serie tan poderosa como tenebrosa, es especialmente dura en el retrato de una casta política capaz de hacer el wasp por la mañana, el avestruz por la tarde, y a todas horas extender su falta de ética a todos los estratos sociales.
No tendremos la suerte en este país de hacer un serial sobre GÚRTHEL, el 3%, Pretoria o Malaya. Con la banalidad de un "Cuéntame" lleno de antifranqusitas de guardarropía tenemos bastante. Detestable América, adorable América con su capacidad para seducirnos, admirable América con su autocrítica feroz, casi despiadada.
Yo quería hablar de Cascos, de Rajoy, de Fernández Vara, de Barreda, de Chaves-Zarrías ( dos por el precio de uno ), de Griñán, pero es todo tan escasamente literario....
No hay comentarios:
Publicar un comentario