miércoles, 27 de abril de 2011

YA SABEMOS LO QUE SOMOS

Bernad Shaw es el gran perpetrador de anécdotas. Cuando no es posible colocársela a Oscar Wilde, aparece el fabiano Bernad para rellenar el hueco. Cuentan que un día estaba el bueno de Bernad en un banquete con algunas distinguidas y postvictorianas señoras.Éstas se burlaban de otra distante comensal con fama de señora "distraída", afeando su costumbre de venderse a un adinerado amante, y llamándola, sin decirlo como corresponde a una señora postvictoriana, puta. Intervino Shaw y le preguntó a la más irónica de sus interlocutoras:
- ¿Sería Ud. capaz de acostarse conmigo por una libra? -
- ¡¡ Sr. ¿Por quien me ha tomado Ud? -
- ¿ Y por un millón de libras? -
- ...bueno, por esa cantidad....-
- Pues bien, Sra. ahora que sabemos qué es Ud, vamos a empezar a regatear el precio -

He recordado la anécdota de Bernad Shaw, ante el fasto y el silencio que han suscitado la visita del jeque y la glamurosa jequesa de Qatar. 3.000 millones de euros en inversiones varias, nos han permitido saber lo que somos como país, el precio que nuestro Gobierno pone a nuestro silencio y a nuestra sumisión. Y sin regatear.

Dejo una verdadera frase de Bernad Shaw, fabiano, demócrata, crítico con esa democracia sumamente imperfecta que era el Reino Unido postvictoriano. Va como anillo al dedo a nuestra situación post ¿qué?: "La democracia sustituye las designaciones que afectúa una minoría corrompida por las elecciones que efectúa una mayoría incompetente."

2 comentarios:

Espartaco dijo...

Sí, hace años que vienen pasando estas cosas. Mire usted que comparto su análisis y lo amplío: Francia, Reino Unido de la Gran Bretaña, Alemania, Italia, Estados Unidos de América... no creo necesario seguir

¿Acaso hay diferencias?

Pero no se preocupe, está todos ellos bendecidos y perdonados de sus pecados por el FMI

miguel angel de uña dijo...

Amigo Espartaco. Evidentemente, "business are business". Pero recuerdo otros socialistas, con sus contradicciones como no, pero de otra pasta: Olof Palme por ejemplo. De los conservadores, como es evidente, es mas difícil salvar ni siquiera a diez justos como en Sodoma.