D. JOSÉ BLANCO en su papel de hombre de estado, desdoblamiento no desdeñable del verdulero de otros momentos, nos ha dejado ayer otra frase para la Historia, frase con ritmo de bolerazo, "ya nada volverá ser como antes". El mismo que prometió AVEs para cada capital de provincia, miles de millones en obra pública para hacer de KEYNES el santón que nos salvaría de la crisis, ha dejado en menos de un mes de creer en sí mismo, de hacer que su discurso pase a mejor vida. Arcadi Espada recuerda lo dicho con la misma rotundidad que ayer dijo lo contrario sin ánimo de contricción, ni dolor de corazón, lo que hace ineficaz su confesión.Y dudo que ante las próximas elecciones haya propósito de enmienda si repunta, aunque solo sea en las estadísticas amigas, la economía ¿nacional?.
Espero que cierren el aeropuerto de Huesca, el de Lérida, el de Salamanca... por hablar de tierras propias y adoptadas. Espero que cierren las dos terceras partes de las universidaditas nacidas para mayor gloria del nepotismo local. Confío en que después de leer el artículo de JHON MÜLLER en "El Mundo" de hoy sobre los costes del AVE, para que nadie vindique un AVE a Cantabria, para mayor gloria de 600.000 habitantes en un cul de sac y los 175.000 de la envejecida Palencia, pero sobre todo para dar lustre al cacique moderno de turno, trastocado en foramontano en una nueva Reconquista contra la pérfida "Madrid". Y así un sinfín de estupideces, que nos han hecho creer que el gratis total era posible hasta el infinito. Hay que decirle a la gente la verdad, pero no solo cuando las autoridades económicas europeas han trazado la raya de la mínima racionalidad. Imagino que D. JOSÉ BLANCO le tendrá que explicar esa lección a PEPIÑO.
4 comentarios:
Bueno, y espero que aprendamos que la vida no es una fiesta permanente, que el mundo es finitio, que sus recursos son limitados y que comience un nuevo modelo por ejemplo con el tema del AVE, en vez de tanto tren sólo para unos pocos tengamos trenes normales, muchos, buenos y baratos, que sirvan a la gran mayoría de la población. Y por eso ni AVE, ni aeropuetos inútiles, ni EXPOs ni Olimpiadas, ni tonterías similares...
Pero todo eso lleva una pregunta lógica ¿puede el sistema actual prescindir de todo ese boato y esplendor y sobrevivir al mismo tiempo?
Yo creo que no
Evidentemente Espartaco, puede sobrevivir. El ejemplo son las sociedades nórdicas, calvinistas ( no en el sentido Bono), ordenadas, ricas, avanzadas tecnológicamente, fundidas con el medio ambiente, etc, etc. Y sin demasidas diferencias entre los hijos de Olf Palme y los actuales derechistas suecos o daneses. Países sin corrupción ( a pesar de Mankell o de Larsson ), austeros y con la cabeza sobre los hombros. A Noruega se le acabará el petróleo, pero no el bienestar. Vea un mapa de Noruega y sus pocos disparates en autopistas, AVEs, Guggenheims y demás aditamentos de nuestro aldeanismo. Claro que no tiene que venirse abajo el sistema.
Interesante modelo nórdico. Lo que no tengo tan claro es que sean el mejor exponente de las sociedades calvinistas, para mí, el mejor modelo de sociedad calvinista es de los USA, despilfarrador, consumista, megalómano...
Y desgraciadamente ese es el modelo que tenemos que seguir.
El modelo nórdico, el de la socialdemocracia, no es el modelo individualista sino el de la colectividad. Y ello se ve en los impuestos, su progresividad y las prestaciones del Estado. Claro que eso, con su elevadísimo nivel de funcionarios y el importante peso del sector público en la economía está en profunda contradicción con las ideas que apunta en este blog.
Estimado Espartaco. Advierto que me ve usted como un liberal de la escuela de Chicago.Creo, sinceramente que se equivoca, y que rastreando mis post no puede sacarse esa conclusión. He dicho por activa y por pasiva que me siento orgulloso de servir en la función pública, desde el primer momento, 19 de Julio de 1975, hasta aquí. Haciendo lo mismo con administraciones del PSOE, que con el PP: trabajar y nunca medrar. Ser crítico siempre, es lo que tiene. Nunca me quejaría de un sistema público "hipertrofiado" de gente ajena al cargo de confianza, a la comisión de servicios, al paso sin transición de lo público a lo privado,al amiguete descarado, al vago redomado, a la baja laboral como protesta ante ofensas reales o ficticias. Podemos seguir enumerando calificativos de la administración pública que me gustaría tener y que la golfería de unos, arriba, y otros, abajo, no nos deja tener. Seguimos siendo herederos de Rinconete y Cortadilo, y eso sin haberlo leído. Si algún día nos vemos cara a cara, le puedo dar los mil y un ejemplos que acumula un funcionario medianamente decente, tras 35 años de experiencia laboral.
La socialdemocracia nórdica ( aquellos países ya funcionaban bien antes de que llegaran los socialdemócratas ), no han ahogado a Nokia, ni a Erikkson, ni han dejado de hacer negocios con BP en la plataforma noruega. Nunca habría habido un Caja Sur o un CCM, ni con el centroderecha sueco, ni con el centroizquierda sueco. El "calvinismo" es eso: rigidez moral. Pero tampoco lo sacralizo. También son humanos.
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