martes, 27 de enero de 2009

¡VAYA TROPA!

Nunca mejor traída la exclamación de ROMANONES. El PP enredado en sus cainitas confictos, alimentados por el "enemigo" y realimentados por sus propios rencores. El PSOE protegiendo a un Presidente incapaz de afrontar la realidad, negando no como S. Pedro tres veces, sino las que hagan falta. ¡ Qué decir de los nacianalistas, empeñados en abrir embajadas, en implantar lenguas, mientras los ERE siembran de parados los barrios dormitorio del proletariado que dicen defender !. Es un momento en el que en todos los países serios, los gobiernos de concentración se imponen con el fin de garantizar los máximos consensos ante una crisis impredictible en su profundidad y duración. Comenzó la MERKEL, siguió SARKOZY y ha terminado OBAMA, con gobiernos de concentración clásicos como el alemán, de asimilación de los contrarios, como el francés, simplemente "centrista" como el norteamericano, trufado de clintonianos, pero también con algún republicano recalcitrante.

Y aquí seguimos con las SORAYAS y los PEPIÑOS, tirándose fruslerías a la cara, haciendo ejercicios de retórica para contentar a parroquianos acríticos y pasados de rosca en su sectarismo. Seguimos con RAJOY en la luna de su autocomplacencia, y con RODRÍGUEZ ZAPATERO reflejándose en el relumbrón de su sonrisa de "smiley". Seguimos en las conspiraciones de aldea y en el trampantojo de los carteles del "Plan E", 10 millones de euros mas caros que lo presupuestado para la modernización de la Justicia. Creo que si ROMANONES volviera no se contentaría con el ¡ vaya tropa !, seguro que elegiría palabras mas gruesas.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Un saludo Miguel Ángel.
Te sigo habitualmente y admiro la facilidad que demuestras para hilar tus ideas y convicciones.
Admiro y envidio; por eso, cuando encuentro algo criticable, me llama la atención especialmente. Es lo que me sucede con ese adjetivo “impredictible” que le endosas a la crisis.
Pobres de nosotros, además de recesíón, embarazados de ZP durante tres años más, por no funcionar el Predictor adecuadamente. Aunque no podemos echar la culpa al test, sino mas bien a los Balbases que enraizaron la semillita de Maragall y Marcelino.
Claro que también esos Balbases ayudaron a la Lideresa que es mi esperanza para 2012.
Dos mil doce, pues no está lejos; es urgente echar a ZP y no hay ocasión ni posibilidades de manifestarlo más que en la vida diaria o en las elecciones.
Menudo lio ,veo a Balbás en El Gato al Agua.
Cosas veredes Nicomedes.
Claro que a mí también me dice mi mujer:“ Churry, cuánto has cambiado!, si hace cuatro días adorabas a Julio Anguita!, y ahora te me has vuelto liberal.”
Le contesto:- “Que los años me concedan lo que me falta”.
-“¿Y eso?”.
-“No se. Lo dicen en mi trabajo.”

miguel angel de uña dijo...

Estimado contertulio. Cuando digo "impredictible" como calificativo de la crisis, lo hago desde la gravedad del desfonde financiero de las entidades bancarias, que creo ha sido excesivo para lo que podía esperarse, ante la asuencia de vigilancia, o la credibilidad ( ? ) de los supervisores estaunidenses. Siempre merece recordar que la crisis hipotecaria norteamericana, nace en dos entidades cuasiestatales, a las que la Administración Clinton "obligó" a asumir hipotecas de los "ninja". Y que esa misma Administración, rompió con los "rígidos" controles que tenía la Banca americana. Es evidente que no es óbice para responsabilizar a la Administración Bush de haber seguido dando hilo a la cometa, necesitada como estaba de un desarrollo acelerado ( por falso que fuera ) con el fin de extraer recursos para pagar la Guerra de Iraq, tan cara, como mal planteada.
La crisis española era todo menos imprecitible, y prueba de ello es la connotación que tiene como destructora de empleo, algo que no sucede en el resto de las economías europeas, afectadas también por la crisis financiera. ZP, tras criticarlo, se subió al carro de la política económica del PP, y con ello nos ha llevado a un desastre previsible. Sí sumamos su aventurera política autonómica,y su incapacidad para tomar las medias oportunas, tenemos la tormenta perfecta que nos azota y sin que tengamos claro hasta cuando la sufriremos, dada la calidad moral del personaje y de sus pajes.
Con respecto a Anguita, creo que lo le hacía atractivo para gente que estamos en la izquierda, era su incorruptibilidad y su carencia de hipocresía, no el trasfondo de su ideas. Hemos llegado a eso, a idealizar a los decentes. Por eso yo tampoco me preocupo por haber sido "anguitista"