Soy habitual lector de "La Vanguardia", por el mero hecho de que regalan docenas de ejemplares en varios centros de trabajo. Era un gran periódico hasta que se pasó con armas y bagajes al correcto discurso del oasis catalán. La necesidad obliga. Hasta hoy, las referencias a UPyD eran marginales, cuando no inexistentes, hasta que aparecimos en las encuestas de los últimos días.
En "La Vanguardia" de hoy, uno de sus columnistas, Francesc-Marc Álvaro tiene a bien hacer toda una columna sobre nuestro partido, al que quiere denostar con el apelativo de Partido Nacionalsita Español, y así la titula, "El nuevo PNE". Una columna llena tanto de prejuicios, como de desinformación. El párrafo final, lo dice todo sobre las fuentes en que ha bebido el autor: " Lo mejor de esta broma es que UPyD no sería hoy nada sin el apoyo de varios entornos populares y socialistas". Le presto al autor de la cuasi diatriba, mi propio curriculum y el de mis compañeros de partido en Huesca y Zaragoza, para que expurgue los "entornos populares y socialistas" que nso han apoyado, que han pagado y pagan nuestras facturas de gasolina, nuestras llamadas telefónicas, nuestras horas perdidas despues de salir del trabajo que todos tenemos, porque no conozco entre nsootros ningua clase pasiva de la casta política habitual en ambos"entornos".
UPyD, "esta broma" nace, no sólo como respuesta a los "nacioanalismos perifericos", que también, sino como reacción a la degradación de la democracia española, de la cual la catalana fue en su momento su cabeza ( y ya sabe por donde comienza a pudrirse el pescado ). UPyD, "esta broma" quiere volver a hacer que la política coloque a la ética por encima de la táctica, emprobrecedora y sectaria a que nos han llevado los partidos mayoritarios, a intentar devolver a la ciudadanía la verdad sobre sus orígenes, por encima de los mitos en que basan su poder los "nacioanalismos periféricos" con los que el Sr. Francesc-Marc Álvaro se encuentra habitualmente tan cómodo. Estoy seguro que un Partit Nacionaliste Catalá no le parecería una broma tan indigesta como UPyD.
No se trata de extender los argumentos. Dejar sólo la referencia de que "La Vanguardia" nos comienza a tachar de "nacionalistas españoles" como si fuera un insulto, igual que "La Razón" nos tilda de "izquierdistas", como sí eso nos pudiera partar de cualquier votante de derechas minimamente crítico con lo que ve. En suma, solo nueve meses despues de las elecciones generales, comenzamos a suscitar diatribas más que críticas. Es evidente que "ladran, luego cabalgamos"
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