240 TELEDIARIOS HASTA EL PLEIBISCITO

Rodríguez Zapatero ha decidido dejar de arrimar el hombro durante diez tardes para dar diez mítines en la próxima campaña electoral para las Elecciones para el Parlamento Europeo. Tal vez la marcha de la crisis económica se lo agradezca, dada su capacidad para inaugurar medidas contra la misma. No se lo agradecerá el medio ambiente, manchado por los efluvios del Falcon presidencial. Pero todos tenemos nuestras contradicciones y el fin justifica los medios. ZP intenta echar un cable a ese chico que dibuja caricaturas con tanta gracia, a esa malagueña que nada tiene de graciosa, y a ese personaje digno de mejor guionista en su búsqueda del cementerio de los elefantes ( él mismo dixit ). Pero sobre todo intenta abrir con su imagen 240 telediarios, cuatro diarios por cada una de las seis TVs generalistas, todas ellas rendidas o nada beligerantes a sus encantos políticos. Ha decidido ZP no ser menos que González en aquella aventura de la OTAN, en la que el Gran Poder se la jugó a una carta. Le salió bien, y de aquellos polvos llegaron luego tantos lodos, el pleibiscito le dió tanto poder en su partido y fuera de él, que el silencio y la pleitesía fue la norma de aquel "felipato" que duró tanto como media generación y que se terminó por escasos 300.000 votos.

Rodríguez Zapatero se ve a los cinco escasos años de poder, escocido por una crisis económica de la cual ha sido el primer negacionista. A pesar de su esfuerzo por hacerla una más en la crisis global, el paro se está mostrando como la particularidad hispana, nuevamente un penoso "Spain is different". Y la gente parece empezar a darse cuenta, y a pasar facturas como hemos visto en las pasadas elcciones gallegas o en las nada triunfantes, en la expectativa presidencial, elecciones vascas. La baraka ha empezado a romperse en el Norte y amenaza con ser definitivmaente arrumbada en estas elecciones europeas, que a nadie importan demasiado, pero que en este país siempre han sido elecciones de pataleta. Y Rodríguez Zapatero no está dispuesto a ver la derrota del PSOE, sin jugar la aventura del pleibiscito. Sabe que si se produce un fracaso, las espadas en el seno del PSOE comenzarán a afilarse. Un líder sin más prestigio que sus victorias electorales, no puede exponerse a dos derrotas y media en menos de tres meses. Napoleón, dueño de su inmenso genio, sabía que no podía perder ni una batalla, porque sería su fin y no sólo por los enemigos externos, sino porque sus propios mariscales estarían dispuestos a entregar su cabeza, para garantizar sus fortunas. Salvando las distancias, estoy bastante de acuerdo con el sincero Sarkozy, Rodríguez Zapatero estima que ganar las elecciones europeas, se entenderá dentro y fuera del PSOE, como el pleibiscito que supondrá volver al status quo anterior, volver a disfrutar de la baraka, poder seguir rodeándose de bibianas sin correr ningún riesgo de perder su poder interno y externo.

240 telediarios le separan de la fama o del inicio de la decadencia. Sacar el látigo contra la "derecha" ( "llámame José Luis, Emilio - Botín-" ) nos llevará a una campaña donde los objetos serán Obama, Aznar y Bush. ¿Europa...eso que es, donde cae?, ¿López Aguilar... a sí el dibujante?. 240 telediarios de ojos azules, mentón impostado y látigo "izquierdista". ¿Ideas?:en las próximas elecciones, 2011.