martes, 6 de diciembre de 2011

LA LUCECITA

Un gran hombre siempre tiene la luz encendida. Le pasaba a Franco, paradigma de la "lucecita del Pardo", e iniciador de la saga de insomnes salvando a España. Suárez hizo un gasto casi tan tremendo de luz como de tabaco negro y café bien cargado, pastoreando eso ahora tan escasamente apreciado que se llamó Transición. ¿Qué decir de Felipe, aunque la Bodeguiya no dejara salir la luz al exterior?. De Aznar no se conocen lucecitas nocturnas hasta los aciagos días del 11 M, y posiblemente la falta de costumbre, le hizo equivocarse de forma tan palmaria. Zapatero no ha gastado luz hasta aquel día de Mayo en que la Merkel, le hizo bajarse del caballo. Pero desde ese día se ha convertido en un personaje de Shakespeare, mezcla de Hamlet, Macbeth y el Rey Lear, dejando sus despojos fantasmáticos por la Moncloa, ya un tanto superpoblada de espectros. Ahora se habla de la "lucecita" de Génova. Ante el silencio atronador de Rajoy, y su fama de holgazán, ha comenzado un verdadera cruzada para convencernos de que trabaja denodadamente contra el dragón de la crisis, encerrado e insomne, atrapado por los cien mil papeles que sus asesores como nuevos hijos de S. Luis le envía el eje franco-alemán, digno sucesor de aquel Congreso de Viena que abortó el Trienio Liberal. A una juerga ¿liberal?, los Cien Mil hijos de S. Luis; a una juerga despilfarradora, los cien mil brokers del capitalismo salvaje remitidos desde la escasa altura del duo Merkosy. "España es el problema, Europa la solución". Vuelve Ortega. Que apaguen ya la dichosa lucecita.

1 comentario:

africano dijo...

Los cien mil hijos de San Luis ya nos jodierón dejandonos al Rey celón. Y ahora nos joden otra vez con sarko y la merkel. Los Germanos y Galos, sienpre a joder a los Hispanos.Espero que Rajoy tenga los H.... mejor puestos que el traidor.